Una gran fiesta eclesiástica vivieron ayer en la parroquia Cristo Redentor feligreses de distintas iglesias de San Miguelito, donde se llevó a cabo la clausura de la Misión Redentorista.
Fueron 15 días en los que misioneros de Costa Rica, Guatemala y Panamá llevaron la palabra de Dios a muchos rincones de San Miguelito.
José Hidalgo, mensajero laico redentorista, de Alajuela, Costa Rica, dijo que la Iglesia no tiene fronteras y su responsabilidad es hacer discípulos para Jesús.