Así como es el gallo de madrugador, así arrancaron las celebraciones del Año Nuevo Chino del Gallo de Fuego.
Los que iniciaron muy temprano fueron los comerciantes del Barrio Chino y de la Avenida B, quienes quemaron fuegos artificiales una vez abiertos sus locales, según ellos, esto se hace para espantar los malos espíritus.
Otros llegaban hasta la Asociación China del Barrio Chino, ubicado en el corregimiento de Santa Ana, para rezar y dar ofrendas al santo Kuan Kung, una deidad guerrera y el protector del oprimido.