Un golazo de falta de Leo Messi a falta de doce minutos para el final clasificó al Barcelona para los cuartos de final de la Copa del Rey ante el Athletic Club, que ayer fue muy inferior a los azulgranas y no pudo hacer valer, en el Camp Nou, el 2-1 logrado en Bilbao el marcador global favoreció a los azulgranas por 4-3.
El "crack" de Rosario envió el balón a la cepa del poste izquierdo de Gorka Iraizoz, a quien convirtió, con un golpeo envenenado, en estatua de sal, para hacer subir el 3-1 al marcador. Es su tercer tanto del año a balón detenido.





