Pedro Rodríguez, el jugador que tendría un pie afuera del club, anotó al filo del término del tiempo extra el gol con el que el Barcelona doblegó el martes 5-4 a Sevilla para conquistar la Supercopa europea, su cuarto título en lo que va de 2015.
El tanto decisivo llegó tras un tiro libre de Mesi, que rebotó en el muro de defensores. Pedro estuvo atento para empujar el balón a las redes a los 115 minutos, después de que el Sevilla había tenido una reacción impresionante al reponerse de un 4-1 para empatar el marcador 4-4.