Una de las pepitas de oro más grandes extraída en los tiempos modernos de la zona aurífera del norte de California, en Estados Unidos, fue vendida a un comprador cuya identidad fue mantenida en secreto.
El nuevo dueño de la llamada Pepita Butte y su precio exacto permanecerán en el misterio a petición del comprador, reportó el periódico San Francisco Chronicle.