Un total de 36 personas han muerto y siete permanecen desaparecidas debido a unas históricas lluvias torrenciales que cayeron durante toda la madrugada de ayer, sobre la ciudad de Hiroshima (oeste de Japón), y que cogieron a las autoridades desprevenidas.
En solamente tres horas cayó el agua equivalente a la que se recoge normalmente en todo un mes de agosto en esta región montañosa en la que se registraron en 24 horas 243 milímetros, lo que causó inundaciones y violentos desplazamientos de tierra.





