Siete exjugadores de fútbol americano profesional apelaron un acuerdo colectivo tentativo alcanzado con la NFL para compensar a quienes han sufrido daños cerebrales a causa de practicar este deporte.
La apelación recoge quejas previas de algunos jugadores en el sentido de que no recibirían una compensación justa según el acuerdo, que cubriría a unos 20.000 jugadores retirados durante 65 años, especialmente a quienes se le negara o redujera la cantidad debido a apoplejías previas u otros factores.