Lindsay Lohan todavía no ha superado el duro revés que supuso ver su historial de amantes expuesto. Sobre todo, debido a las especulaciones que apuntaban a que había sido ella misma quien olvidó la lista -que incluía nombres como Colin Farrell o Justin Timberlake- en un bar.
"La escribí cuando estaba en la clínica de rehabilitación Betty Ford, como parte de uno de mis ejercicios de Alcohólicos Anónimos. El anonimato que implicaba jamás debería haber sido violado; alguien robó el papel y lo filtró. Fue un acto muy cruel. Se trata de algo muy íntimo", aseguró.





