Las autoridades de Turquía levantaron el bloqueo que desde marzo impusieron sobre YouTube, después de que una decisión del Tribunal Constitucional calificara de ilegal el cierre de la web.
Tras analizar una queja del Colegio de Abogados de Turquía, los jueces decidieron que el bloqueo del canal vulnera la libertad de expresión y los derechos individuales de los denunciantes.





