Diferentes líneas de relojes están marcando la tendencia.

Por ejemplo, la línea deportiva para los varones ofrece colores neutros como el negro y otros más vibrantes como el coral y el naranja. La pantalla que le acompaña es táctil y LED, de última generación, que muestra la hora, fecha y la función de cronómetro, junto a una banda de caucho con textura brillante.

Mientras que los relojes tipo pulsera para las chicas les logra crear un “look” más acorde con su “outfit”, luciendo un perfecto accesorio en su muñeca.

Estos son sólo algunos ejemplos de la originalidad que tiene el pueblo Chitré, para bautizar con nombres poco comunes a su gente y sus calles. Aunque éstas tienen nombres registrados para identificarlas, basadas en nombres de personajes ilustres del pueblo o fechas importantes, los moradores prefieren utilizar estos apodos, más comunes o conocidos.

Muchos residentes desconocen los verdaderos nombres de las calles.

Para el sociólogo herrerano Milciades Pinzón, muchos de estos rasgos son parte indiscutible de la chitreanidad, eso que encanta a propios y extraños, y que no es más que una mezcla entre la modernidad y el apego por la ruralidad de los inicios del pueblo.

En su blog “Sociología de Azuero”, Pinzón destaca que a diario se escucha en las calles la frase “aún se puede vivir en Chitré”. No es otra cosa que el encanto de lo urbano y la apacibilidad de la ruralidad.

Quien visita la moderna y siempre cálida ciudad de Chitré no puede pasar por alto el hecho de que, a pesar de su rápido crecimiento, parte de la chitreanidad consiste en mantener ese gusto por las tradiciones y el arraigo por las cosas auténtic