Tropas rusas asaltaron con carros blindados una base militar ucraniana situada en la localidad de Belbek (Crimea), después de haber dado un ultimátum a los mandos de esa unidad para que entregaran el cuartel o cambiaran de bando.
Al menos seis carros blindados rusos participaron en el asalto de la base, en el transcurso del cual se escucharon disparos y al menos un periodista resultó herido.