Antes de llegar a Nombre Dios, unos de los pueblos de la costa arriba de Colón, doblas a la derecha, en una estrecha calle de tierra se encuentra con lo poco que queda de una locomotora de vapor.
A ese sitio dónde se encuentran los restos de lo que fue la máquina de vapor de la locomotora le llaman la línea. Se ganó el nombre porque pasaba la vía del tren que atravesaba el sitio transportando el manganeso, hasta llegar a la playa en Nombre de Dios, de allí era transportado en barco.





