¡Qué tristeza! Los pequeños hijos del actor Charlie Sheen y Brooke Mueller, Bob y Max, de cuatro años, pasan por un mal momento; podrían estar sufriendo de el síndrome alcohólico fetal, una condición que incluye problemas físicos, mentales y de crecimiento que se pueden presentar cuando la madre toma alcohol durante el embarazo.
Esto podría ser consecuencia de las adicciones de su madre Brooke Mueller.
A raíz de esto, serán sometidos a pruebas para determinar si padecen esta seria condición.