Miles de ecuatorianos acudieron ayer a un servicio religioso público para despedir al delantero Christian Benítez, en medio de escenas conmovedoras y lágrimas de familiares y fanáticos minutos antes de su inhumación.
Chucho Benítez falleció el lunes en Catar de un infarto. El médico de la selección ecuatoriana, Patricio Maldonado, indicó el viernes que la segunda autopsia reveló que el goleador padecía de un defecto cardiaco congénito imposible de detectar.