Leí en un libro que un periodista no describe el amor como una definición, sino como una acción que denota amor.
Yo voy más allá. En cada momento de la cotidianidad de nuestras vidas, el amor está presente aunque no nos percatemos de ello. Solo hay que bajarse de la nube del estrés y mirarlo cara a cara.
Hace unos días, cuando me levanté temprano en la mañana, miré a mi nieto de casi dos años mientras dormía.





