Una estatua gigante del fallecido papa Juan Pablo II de la que se dice es la más elevada del mundo fue inaugurada el sábado en el sur de Polonia.
El arzobispo Waclaw Depo develó el monumento en honor del pontífice polaco en la ciudad meridional de Czestochowa, sede del monasterio de Jasna Gora, el centro de peregrinación más importante de este país predominantemente católico.
La estatua blanca de fibra de vidrio tiene una altura de unos cinco pisos, casi 14 metros (más 45 pies), en una colina que domina la ciudad.