Con su inconfundible boina roja de paracaidista, vestido de verde militar y con la banda presidencial en el pecho, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, luce en el féretro tal y como era, según describieron ayer los afortunados seguidores que pudieron ver el cuerpo tras largas horas de estar en fila.
Está vestido de militar, está así tranquilito, como sonriente, quedó bello, dijo John Jackson Rivero, un comerciante de 34 años que salía emocionado de ver a su presidente después de haber esperado más de 13 horas en la intemperie.





