Todavía asustados, los moradores del corregimiento de Llano de Piedra, que suman unos mil 737 habitantes, están temerosos tras el sismo que se registró anteayer, en Los Santos.
Yo estaba en mi cuarto y tengo una lámpara de noche al lado de mi cama, cuando de repente casi se cae y la casa se movía y techo empezó a sonar fuerte; yo decía, Dios mío, Dios mío. Me acordé fue de Dios, dijo con una sonrisa Delfín Gutiérrez.
Eso fue por varios minutos. El sismo causó rajaduras en las paredes y levantó unos azulejos del baño de la vivienda de Gutiérrez.