En la mayoría de los casos las reacciones secundarias a las vacunas son leves e incluyen dolor, enrojecimiento e induración en el área de la aplicación, fiebre y brotes cutáneos leves.
Hay condiciones inusuales y serias como reacciones alérgicas severas, fiebre alta y persistente, convulsiones, irritabilidad y llanto persistente (de más de tres horas). Si estas reacciones ocurren se debe consultar de inmediato al médico tratante y evaluar su condición general.
Alternativas