- Vista de la actual estructura Dada
- en concesión
- a empresa para remodelarlo.
Un grupo de santiagueños que forman parte del comité Pro Rescate a la Cultura en la provincia de Veraguas realizaron ayer domingo una protesta pacífica.
La acción de los manifestantes terminó con la quema de un muñeco frente a las instalaciones municipales y representaba a los ediles que otorgaron en concesión un edificio público a una empresa privada.
La educadora jubilada Donata Degracia, miembro del mencionado comité, manifestó que la comunidad santiagueña repudia la decisión de los concejales, ante las necesidades que se tienen para darle mejor utilidad a las estructuras donde anteriormente funcionó la unidad sanitaria y la Gobernación de Veraguas.
Los manifestantes informaron que el edificio, considerado como patrimonio de la historia de la capital veragüense, se podría usar como la casa de la cultura y no remodelarlo y usarlo como centro comercial en el que no se descarta que se le quite su valor histórico.
Arthur Batista, miembro de la juventud santiagueña, dijo que van a exigir a que los concejales deroguen el acuerdo de concesión para que el antiguo edificio, construido en 1936 por la administración del doctor Juan Demóstenes Arosemena, sea convertido en algo que la comunidad utilice para su propio beneficio.
Pidieron que la mencionada estructura sea para proyectos como una escuela de música, artes y bailes para niños, niñas, jóvenes y adultos, bibliotecas y centro de eventos sociales y culturales.
Los santiagueños indicaron que la concesión se hizo de manera inconsulta, por 20 años, a una empresa conformada por ciudadanos de nacionalidad asiática.
Según los miembros del comité Pro Rescate a la Cultura, en los próximos días continuarán con las protestas hasta que se derogue de una vez por todas la resolución que otorga la concesión a una empresa asiática.