Cómo veo el reggae
Soy una de las pioneras del género urbano panameño e intérprete de temas como: Vuelve ya, Las guiales, No voy a llorar, entre otros, y decidí incursionar en el género reggae romántico justo después de terminar la escuela secundaria.
Siempre supe que quería componer y producir algún día mis creaciones musicales, pero nunca imaginé que mis obras serían difundidas de forma masiva a nivel nacional e internacional y eso se logra con mucho esfuerzo, creer en una misma y pasión.
Recuerdo oír música reggae por primera vez en 1987 con el Deny de Renato. Ese ritmo era de lo que mi generación estaba careciendo. Recuerdo que teníamos haitiano, típico, calipso y salsa, pero nada para los jóvenes.
Un verano en el campamento del Parque Omar/Soberanía/Héctor Gallego-Verano Feliz 1987, recuerdo claramente cómo entre juegos y entrenamientos, los niños improvisaban sus experiencias al ritmo de reggae creados con palos y sonidos vocales. Esa fue mi primera experiencia con lo que luego se conoció como rapeo. En ese momento y a muy corta edad supe que lo que estaba presenciando era algo que estaba en nuestro país para quedarse, el reggae en español.
De niña recuerdo que en la ciudad capital los jóvenes nos desvivíamos por el reggae en español, pero al viajar a la provincia de Colón, la intensidad y la pasión por este género estaba a otro nivel. En Colon tenían pasos para cada tema, se sonaban canciones que nunca llegaban a la capital y había más exposición al reggae de Jamaica.
Decidí audicionar para un grupo de mi vecindario en Campo Limbergh y me dieron el trabajo. Gracias a Rude Boy y Padrino empecé a cantar en ritmo de reggae. En 1996, no éramos muchas las que nos atrevíamos a cantar y era aún más difícil que el tema se divulgara en la radio.
Lo siento, se me acabó el espacio. Seguimos mañana. Espérenlo...