Gypsy Rose celebra su libertad entre 'selfies' y hamburguesas
La estadounidense salió el pasado jueves, 28 de noviembre, de prisión tras cumplir condena por el asesinato de su madre.
Gypsy Rose Blanchard, la mujer que fue condenada por el asesinato de su madre, Dee Dee Blanchard, en 2015, compartió su primera foto en Instagram, tras salir en libertad el 27 de diciembre.
En la foto, Blanchard aparece sonriendo y mirando a la cámara en un espejo. “¡Primer selfie de la libertad!”, escribió Blanchard en la publicación, que ya tiene más de 5 millones de "me gusta".
La estadounidense salió el pasado jueves, 28 de noviembre, de prisión tras cumplir condena por el asesinato de su madre. Tras abandonar la cárcel, fue vista disfrutando de las hamburguesas de una popular cadena de comida rápida.
La historia de Gypsy Rose es una tragedia que involucra abuso, manipulación y un crimen impactante, pues le quitó la vida a su madre para liberarse de ella. El homicidio lo hizo en complicidad con su novio, Nicholas Godejohn.
Su caso conmocionó al mundo, para algunos la mujer de 32 años era víctima de su progenitora, Dee Dee Blanchard. Su madre la obligó a usar silla de ruedas, fingir un cáncer e, inclusive, tomar medicamentos que no necesitaba. Pero otras personas, la critican por su forma de liberarse de esta situación.
“No estoy orgullosa de lo que hice”
Gypsy dio una entrevista exclusiva a la revista People antes de su liberación de prisión. En la entrevista, habló sobre sus planes para el futuro. Asimismo, resaltó que se arrepiente de lo sucedido con su madre. “Nadie me oirá jamás decir que me alegro de que esté muerta o que estoy orgullosa de lo que hice. Lo lamento todos los días”.
Blanchard también relató que Dee Dee la mantuvo alejada de su padre, madrastra o sus medios hermanos. “Hice lo mejor que pude para ser respetuosa, pero a veces era difícil. Ella me insultaba y golpeaba. Era muy similar a una relación con violencia doméstica”.
¿Quién es Gypsy Rose?
Gypsy nació en Nueva Orleans, Luisiana, en 1991. Desde muy joven su vida estuvo marcada por las enfermedades que su madre le diagnosticaba.
Dee Dee sufría de un trastorno mental llamado síndrome de Munchausen por poder, en el que un cuidador inventa o provoca síntomas falsos en un niño para que parezca que está enfermo.
Según Dee Dee, Gypsy sufría de una serie de enfermedades crónicas, incluyendo leucemia, asma, epilepsia y un trastorno neuromuscular. También, mentía sobre la edad mental y física de Gypsy, diciendo que era mucho más joven de lo que realmente era.
Gypsy fue sometida a numerosos tratamientos médicos, incluyendo cirugías y quimioterapia. También, estaba en silla de ruedas y recibía alimentación por sonda.