Síndrome pragmático
Los aspectos pragmáticos del lenguaje se sustentan en las habilidades lingüísticas, pero también dependen de las habilidades cognitivo-sociales del individuo. De aquí que este trastorno sea especialmente interesante en los autistas, puesto que en el autismo se conjuga la alteración lingüística con la alteración en la relación social, sustentada en una dificultad para interpretar el pensamiento del interlocutor.
Tomando en cuenta estas variables, se empezó a difundir la idea que los trastornos específicos del lenguaje y trastornos autísticos no son términos excluyentes, sino que por el contrario se ubican en un continuo.
Algunas de las aracterísticas que incluye son: retraso en el desarrollo del lenguaje; aprender a hablar con frases de memorización, en lugar de poner palabras juntas libremente; repetición de frases fuera de contexto, sobre todo fragmentos recordados de los programas de televisión; inadecuado uso del "yo" y "tú"; problemas con la comprensión de las preguntas, en particular las cuestiones que impliquen el "cómo" y "por qué"; dificultad para seguir las conversaciones.
Los niños con este trastorno tienen problemas para comprender el significado de lo que dicen otras personas y no entienden cómo utilizar adecuadamente el habla por sí mismos.