Buses en miniatura
Confeccionar buses miniatura se ha convertido en la principal actividad que realiza Franklin Pinto, de 18 años, residente en El Valle de Antón.
Él asegura que los hace con cartón y son tan parecidos a los originales que ya buseros se los encargan.
Pinto se inició hace unos diez meses en la confección de los vehículos, a pesar de que su familia no lo apoyaba, porque ellos pensaban que era una locura.
Él recuerda que hace unos cinco años se entusiasmo armando los diferentes diseños que venían en las cajas de cereal, pero no fue hasta este año que se atrevió a hacer un modelo propio y con tan buena suerte que se lo presentó a un conductor de bus a quien le gustó tanto que lo adquirió.
Ahora este es su trabajo diario, tanto así que Franklin ya se considera casi un experto, porque se dedica a esta tarea todos los días y esto, además de ayudarle en su economía, le permite seguir creciendo como artista.
Esta labor es tan importante para este joven que ya está enseñándola a un pequeño de 11 años que se apasiona por los carros, y qué mejor manera de jugar con un auto que confeccionándolo.
El pequeño aún no ha hecho ningún vehículo, pero ya inició las clases con Franklin, quien muy emocionado le enseña para que él pueda crear su propio busito y venderlo.
Los vecinos de Franklin están impresionados y aseguran que este joven es muy talentoso, con lo que demuestra que la juventud puede salir adelante y explotar su talento.
Mario Urriola, vecino de Franklin, comentó que él tiene un serpentario en la comunidad de Capirita y cada vez que pasa por El Valle ve a este joven trabajando en estos carros.
La verdad es que jamás pensé que se podía utilizar cartón, materiales reciclables (llantas de juguete) y pintura para confeccionar este tipo de artesanía, que es del gusto de cualquier busero en El Valle y la provincia de Coclé.
Para los buseros y demás conocidos de Franklin se trata de gran creatividad, pues cada pieza vale el precio al que es vendida, ya que a Franklin le toma aproximadamente un mes tenerlos listos, con el color que desea el comprador y hasta con algún logo o diseño que desee el cliente.
Actualmente, Franklin tiene un pequeño taller en su casa, en una parte que antes era un quiosco, pero anhela tener su propio taller para confeccionar, junto con su aprendiz, los carros y buses que les soliciten.