La liga profesional de fútbol femenino estadounidense (NWSL) despidió hoya Amanda Cromwell, entrenadora del Orlando Pride, y a su colaboradora Sam Greene por "abuso verbal", "favoritismo" y "represalia", después de una investigación sobre conductas irregulares hacia las jugadoras.
La NWSL informó en un comunicado oficial de que "los contratos de Cromwell y de Greene se cierran de forma inmediata" y que las dos entrenadoras ya no son elegibles para trabajar dentro de la liga.