Con el inicio de las fiestas de fin de año, hay billete en las calles. Los trabajadores reciben el pago de sus ahorros navideños, décimo y demás, con eso comienza el movimiento por las compras y ventas en los diferentes comercios, pero con ello también viene el desespero de los dueños de lo ajeno, que andan al acecho de sus víctimas.
En las paradas, los autobuses o donde usted menos lo piensa, están pendientes de sus carteras y bolsillos los famosos "piqueadores" o "carteristas".