La fama de bromista del actor hizo que su prometida Amal Alamuddin no le creyera cuando le pidió matrimonio.
Hasta hace muy poco, el soltero de oro tuvo que pedir matrimonio a su ahora prometida dos veces, dado que su fama de bromista restó credibilidad a su propuesta.
Amal pensó al principio que estaba gastándole una broma. Vieron, a ser serios, señores.