El piloto británico Lewis Hamilton (Mercedes) ganó ayer el Gran Premio de China de Fórmula Uno (cuarta etapa del Mundial), en el Circuito Internacional de Shanghái, en una carrera sobre seco en la que el español Fernando Alonso (Ferrari) fue tercero.
El tercer triunfo consecutivo de Hamilton, unido al segundo puesto del alemán Nico Rosberg, que cruzó la meta 18 segundos después, confirma la hegemonía de Mercedes en esta primera fase del campeonato.





