Casi uno de cada cinco neoyorquinos, unas 1.400.000 personas, dependen a diario de las ayudas de las autoridades y organizaciones no gubernamentales para comer, en una ciudad donde se concentran algunas de las mayores fortunas del mundo.
En los últimos cinco años se han sumado a la lista otras 200.000 personas que acuden a los cerca de un millar de comedores populares y bancos de alimentos repartidos por la ciudad, según datos que publica hoy el periódico Daily News.





