El paradero del presidente ucraniano Viktor Yanukóvich continuaba desconocido ayer, un día después de que abandonara la capital y de que su mayor rival política, Yulia Tymoshenko, fuera liberada de prisión y regresara a Kiev para pronunciar un discurso ante la aclamación de una gran multitud.
Un avión con Yanukóvich a bordo no recibió permiso de despegar el sábado con destino a Rusia.