Un joven de aproximadamente 30 años fue mordido ayer en la tarde por un lagarto, justo cuando disfrutaba de las aguas del río Chico en Natá, por lo que fue trasladado al hospital de Aguadulce en un vehículo particular.
El río Chico tiene varios balearios, algunos secos, pero los bañistas prefieren lugares más hondos y allí hay algunos lagartos, como el que sorprendió al joven quien se salvó porque fue auxiliado por sus amigos y otros bañistas. Su condición de salud es estable.





