Sin embargo, tras cuatro meses, siete goles y aportar para el subcampeonato en el Torneo Apertura 2012 del fútbol azteca, llegó el Clausura con más penas que glorias para el canalero.
Apenas un tanto en todo el certamen no llenó las expectativas de la directiva, por consiguiente fue desechado y ofrecido a los Tiburones Rojos de Veracruz, equipo con el cual ahora busca demostrar todos sus quilates.