La diversidad de personas emprendedoras que se encuentra en Panamá crece cada día.
Cada individuo tiene una perspectiva de su futuro y un plan para trazarlo.
Uno de ellos es Matildo Escudero, que con su sudor y perseverancia unió dos ideas, la primera es la conservación del medioambiente y la historia, y la otra es producir ganancias.
Es entonces cuando crea su propia tienda de arte, llamada Matildos, en Campana, donde mezcla lo antiguo con lo moderno, lo rústico con lo fino, creando piezas únicas.