Que tal Moza, cómo anda. Es la primera vez que le escribo, porque ya me estoy cansando de la situación que estoy viviendo. Todo mi problema es con mi esposo de 40 años.
Él era perfecto, me atendía, me trataba como a una reina y no permitía que a nuestros hijos les faltara nada.
Ahora, todo eso se perdió. Solo piensa en él, dice que aún está joven y puede hacer otras cosas que no sean dedicarle el 100% a su hogar.





