La paciencia y el amor que le tiene a su profesión ha convertido a Esther Reyes una de las maestras preferidas de los más pequeñines de la Escuela Manuel Amador Guerrero en El Chorrillo.
Ella es educadora desde hace 18 años, de los niños de pre kinder y kinder de esa escuela, algo difícil, pues ellos están muy apegados de sus padres y ella tiene que empezar a enseñarles la importancia de estudiar.





