Increíble, pero el cascaroso Sócrates Lasso se hizo su cuarto tatuaje en el brazo izquierdo. Cuenta Sócrates que le encanta la leyenda de cómo Leonidas con solo su guardia personal se enfrentó a un ejército de millones sin rendirse.
El cascaroso nos confesó que le dolió buco, pero que él aguantó como todo un hombre que es. ¡Ahí ta!





