Hay una buena noticia para aquellos que están tristes porque tendrán que restringirse y no podrán comer de todo en la cena de Navidad.
Y es que la clave para no dejar todo el progreso que lograron durante el año es comer moderadamente, por ejemplo, si van a disfrutar de esos dulces tan ricos que hace la abuela, programen su alimentación para ese día, incluyendo más frutas y vegetales, de manera que se sientan satisfechos y esos antojos no los lleven a cometer abusos. Pueden endulzar los postres con edulcorantes no calóricos.
Otra opción que puede resultar es consumir porciones adecuadas según cada persona y realizar 30 minutos de actividad física 5 veces a la semana. Restringir el alimento no es la solución, manifestó Claudia Arias, especialista en medicina interna y nutrición clínica de República Dominicana.
Ya saben, siguiendo estos sencillos consejos podrán disfrutar de los diferentes platillos tradicionales de esta época sin tener temor a ganar unos kilos de más después de tanto esfuerzo que hicieron durante el resto del año para rebajar.
