El blackjack o 21 es uno de los juegos más populares y con una mayor cantidad de jugadores en los entornos digitales. El motivo principal por el que tiene tantos aficionados es su corta curva de aprendizaje, su simpleza y las muchas probabilidades de ganar que presenta. Y es que, no solo va a depender del azar, en buena medida también la destreza del jugador será fundamental para vencer al crupier.
Sin embargo, esta fórmula de ocio dirigida al público adulto por entrar en el ámbito del azar y las apuestas, a pesar de ser uno de los que mantienen más seguidores en los casinos online, solo por detrás de las máquinas tragaperras, cuenta con numerosas variantes que no son conocidas por el gran público.
Como se juega al blackjack tradicional
Efectivamente, el blackjack online se presenta de diferentes formas, aunque todas tienen como objetivo ganar al crupier con las cartas que se van recibiendo. En otras palabras, no es un juego cuyos oponentes sean los compañeros de mesa, sino la banca. Para conseguir superarlo, se deberá alcanzar un valor lo más cercano al 21, pero sin pasarse. Si se consigue sacar exactamente 21, diremos que tenemos un blackjack.
Como cabe suponer, conocer el valor de las cartas es fundamental para tener opciones en este juego. De este modo; el As tendrá una puntuación de 1 u 11, según lo que sea más conveniente, algo que dependerá del resto de cartas que compongan la mano del jugador en cada momento de la partida. Por otro lado, todas las figuras valen 10 y el resto de la baraja tendrán su valor habitual, el marcado por su propio número.
En cuanto a las acciones posibles por parte del jugador serán las de pedir (cuando el crupier ofrece una carta que se añade a la mano), plantarse (se deja de jugar hasta el conteo final al final de la ronda), doblar la apuesta (con la condición de doblar la apuesta el jugador podrá recibir una carta más), rendirse (abandonar la ronda) y dividir en parejas (es posible, si se tienen dos cartas iguales, dividirlas creando dos manos diferentes, con lo que cada una de ellas llevará una apuesta diferente.
Se gana cuando, sin sobrepasar los 21 puntos, su puntuación es superior a la que presenta el crupier, o bien cuando se consigue un blackjack (21 puntos de forma natural, es decir, con dos cartas, un as y una figura). Se pierde cuando el crupier lo supera en puntos sin sobrepasar los 21 y si el jugador se pasa de esta cantidad.
Aun siendo esta la base del juego, existen diferentes versiones.
1. El blackjack clásico
Además de jugar con las reglas mencionadas, en la modalidad clásica es posible optar por una apuesta de seguro, es decir, recuperar las posibles pérdidas si la casa tiene blackjack. Son dos las cartas que reparte el crupier.
2. El blackjack americano
Al comenzar cada partida, la banca deberá enseñar su primera carta, si es un as o un 10, también deberá descubrir la segunda carta. Si tiene Blackjack, la partida se termina, los jugadores pierden, excepto aquellos que también tengan las 21, que mantendrán sus apuestas para la siguiente ronda.
3. El blackjack europeo
En esta modalidad la casa siempre juega con sus cartas descubiertas. El crupier se reparte una carta y cuando los demás jugadores han realizado sus jugadas se reparte la segunda carta enseñando su mano.
4. El blackjack High Roller
Esta versión está aconsejada solo para los jugadores más experimentados, ya que las apuestas suelen ser bastante elevadas y arriesgadas. El casino elegirá un High Roller para cubrir las apuestas más grandes y, por tanto, las recompensas más abultadas. Una versión no apta para cardíacos.
5. El blackjack Atlantic City
El jugador podrá doblar con las cartas que posee y separar hasta tres veces si lo considera oportuno. Esta separación no se podrá realizar si la mano del jugador cuenta con algún as.
6. El blackjack Double Exposure
En esta versión el crupier recibirá dos cartas al mismo tiempo y ambas boca arriba. Esta forma de empezar el juego otorga cierta ventaja al jugador, ya que le permite realizar estrategias sabiendo lo que tiene ya la casa. Es una modalidad adecuada para aquellos jugadores noveles.
7. El blackJack Vegas Strip
Como su nombre permite suponer, es la fórmula preferida de los clientes en los casinos de la famosa ciudad del juego Las Vegas. En esta forma de jugar al 21, el crupier va a repartir una carta a cada jugador a cara descubierta, terminando con una para él presentada del mismo modo. En el siguiente reparto volverá a repetir la acción para los participantes, pero, para el crupier, será boca abajo. En el caso de que la carta descubierta de la banca sea un as, se ofrecerá a todos los jugadores un seguro por las supuestas pérdidas.
Para terminar este artículo conviene recordar que el blackjack, en cualquiera de sus variantes, es un juego muy matemático, que requiere velocidad mental, pero con una curva de aprendizaje y profesionalidad muy corta. Esto significa que, en poco tiempo, un jugador principiante puede llegar a convertirse en alguien exitoso, sobre todo si posee también un alto nivel de responsabilidad.
