Unos 300 ambientalistas centroamericanos se reúnen en Panamá para debatir de conservación
"Para tener una restauración que dure por 20, 30 y 50 años debe enfrentar el tema social; trabajar con la gente, con los productores. Eso es algo importantísimo", dijo a EFE Jefferson Hall, científico con énfasis en restauración del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales de Panamá.
Más de 300 ambientalistas y autoridades gubernamentales de Centroamérica se reúnen desde este martes en Ciudad de Panamá para analizar las posibles medidas que ayuden a mejorar la conservación de los bosques, cada vez más amenazados por la deforestación y con un alto costo de restauración.
"No salgamos todos encantados de ver amigos, solamente, sino con un firme propósito de actuar con urgencia, con responsabilidad para enfrentar las realidades de nuestros países. No solamente vean esto como un reto regional", dijo el ministro de Ambiente de Panamá, Juan Carlos Navarro, en su discurso de apertura del evento.
El evento, organizado por el Ministerio de Ambiente de Panamá (MiAmbiente) y la Comisión Centroamericana de Ambiente y Desarrollo (CCAD) del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), reúne hasta el próximo viernes a expertos para debatir las capacidades técnicas que mejoren la conversación y la restauración de los bosques de la región.
Autoridades, gobiernos locales, organismos internacionales, indígenas, ONG, empresa privada y ambientalistas discutirán "sobre las experiencias de restauración forestal en Centroamérica" con el fin de poder "revisar si lo están haciendo bien, van encaminando o se deben hacer ajustes", como explicó a EFE el director forestal de MiAmbiente, Carlos Espinosa.
"Cada país está teniendo sus avances, unos en mayor proporción que otros. Los que están haciendo la diferencia son los países que tienen claros incentivos para motivar a las comunidades, a la empresa privada a que se involucren en la restauración. Eso nos dice que la restauración requiere apoyo", señaló Espinosa.
Restaurar, una técnica "más cara" "Lo que hemos encontrado es que la restauración es mucho más cara que la conservación (...) si queremos realmente hacer las cosas bien, tenemos que preocuparnos por consolidar nuestras estrategias de conservación para que el costo de las restauración sea mucho más bajo", detalló el director forestal panameño.
Los expertos coinciden en que la reforestación es un complejo sistema que abarca un aspecto socioeconómico, por lo que debe ir de la mano con el trabajo de las comunidades locales e, inclusive, de la empresa privada. Aunque, resaltan, las tasas de deforestación en Centroamérica tiene una tendencia a la baja, pero siguen siendo preocupantes.
"Para tener una restauración que dure por 20, 30 y 50 años debe enfrentar el tema social; trabajar con la gente, con los productores. Eso es algo importantísimo", dijo a EFE Jefferson Hall, científico con énfasis en restauración del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales de Panamá.
El director forestal de Panamá, por su parte, subrayó que un ganadero "no va a dejar" la "ganadería por plantar árboles", a excepción de que desde el Gobierno se presente un "paquete tecnológico que permita mejorar su ganadería incorporando árboles" porque destinar "una hectárea a restaurar, es una hectárea que no da para pasto".
La tasa de deforestación neta anual en Centroamérica es del 0,38 %, aproximadamente unas 83.000 hectáreas por año, según datos del Informe Forestal de la FAO de 2020, el último estudio de este tipo que se actualiza cada cinco años.
Centroamérica posee una cobertura boscosa calculada en unos 22 millones de hectáreas, lo que representa alrededor del 42 % de su superficie terrestre total, y enfrenta una constante amenaza debido a las altas tasas de deforestación en varios de sus países, según datos de entes como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Banco Mundial.