Le di gracias al Señor por permitir que Mariano haya llegado a los 602 juegos salvados y haya dejado a Panamá y a Puerto Caimito en alto.
Don Juan describió cómo vivió el emocionante momento: Todos gritamos, brincando. La emoción fue muy grande y todos fuimos testigos de ello. Es (Mariano) una persona muy humilde, muy querida, lo quiero mucho.