Más de 300 aprehendidos y 14 agentes de la Fuerza Pública (FP) de Panamá lesionados, numerosos daños a instalaciones del Estado, vandalismo y saqueos a comercios es el saldo de las violentas protestas en la provincia de Bocas del Toro, la principal zona bananera del país, en contra de una reforma a la seguridad social vigente, informó este lunes el Gobierno Nacional.
A la mayoría de estas personas las arrestaron por su vinculación a los saqueos que se dieron en Changuinola, Bocas del Toro, durante estas manifestaciones, unos 90 de ellos pandilleros, según han dicho las autoridades.
Changuinola fue el área donde más se intensificó la «escalada de violencia» en que degeneraron las protestas y que ya fue apaciguada, de acuerdo con el informe dado hoy por las autoridades sobre los resultados del noveno día de la operación policial ‘Omega’.
Con esta operación se han desplegado hasta ahora un total de 2.500 agentes de la FP para restablecer el orden en Bocas del Toro, donde hace 48 horas rige un «estado de urgencia» decretado por el presidente, José Raúl Mulino, para frenar la ‘escalada de violencia’.
El balance de las protestas en Panamá
El balance ofrecido por el director de la Policía Nacional, Jaime Fernández, destaca que a la fecha hay «un total de 304 personas aprendidas desde el 14 de junio, 286 adultos, 18 menores de edad».
En estos «conflictos» también terminaron lesionadas 14 unidades de la Policía, sin que hasta ahora se haya notificado de que los haya entre los participantes de las manifestaciones y actos violentos en Bocas del Toro, donde, detalló Fernández, más de 13 estructuras del Estado y 20 comercios resultaron con afectaciones significativas, además de cerca de 50 vehículos «vandalizados o quemados».
Según el Gobierno y la Policía, una de las empresas saqueadas la noche del pasado jueves fue Chiquita Panamá, la bananera que tuvo que cerrar operaciones y despedir a todos sus trabajadores en mayo después de que los jornaleros fueran a paro.
«A partir de la noche de ayer estas afectaciones han cesado. Por supuesto (que) sigue latente una amenaza a la cual estamos controlando, le estamos dando seguimiento y así mismo seguiremos con las diligencias que se requieran y los diferentes allanamientos (necesarios) para poder continuar brindando ese orden y ese control dentro del área», afirmó Fernández.
La recuperación del Aeropuerto de Changuinola
El jefe policial aseguró que el día de hoy se logró asegurar el flujo de vehículos que conecta las localidades de Changuinola y Almirante, y que en la primera de estas ya tomaron control del aeropuerto que resultó vulnerado por una turba de personas.
«La consolidación de la Policía Nacional dentro del área Changuinola se logró, y así mismo pudimos tomar posesión del aeropuerto que para nosotros esa era nuestra prioridad principal», remarcó el jefe policial, y recordó que en Changuinola se vivió una situación «bastante delicada» cuando la FP fue objeto de ataques con fuegos artificiales, piedras y bombas incendiarias de fabricación casera.
Fernández reconoció que también afrontaron una «resistencia importante» en otras zonas de Bocas del Toro como Chiriquí Grande, Rambala y Almirante, cuando las autoridades entraron.
Bocas del Toro es la expresión más crítica del conflicto sindical por la reforma a la seguridad social, que involucra un paro de docentes del sector público iniciado el 23 de abril que se mantiene y se ha desarrollado de manera irregular.
En un principio se habían sumando los obreros de la construcción, pero desde hace más de dos semanas este sector volvió a la normalidad.