Amorosos, pegajosos y callejeros, así son los gatitos. Existen muchas razas de gatos y cada una con características diferentes. Sabías que el gato más conocido, probablemente sea la raza denominada, gato común europeo, el cual se hizo muy famoso en Europa, en la época del Imperio Romano, ya que a estos los trajeron desde África. Este linaje posee pelo corto y colores mezclados, predominando el naranja o amarillo y blanco.
También está el gato siamés tradicional. Este es bastante diferente de su pariente. Tiene el cuerpo totalmente blanco o marrón claro, y a medida que crecen, su hocico, patas, orejas y cola se tornan de un color marrón oscuro. Además de esto, tienen los ojos de color celeste. Los siameses tienden a permanecer en el hogar junto a su amo, mientras que los gatos comunes, si bien son muy afectuosos con sus amos, son de salir al exterior a dar largos paseos.
El gato persa es un minino que tiene una cara muy peculiar, es ancha y plana; con respecto a su pelaje, se puede decir que se iguala al del gato europeo, ya que abundan de varios colores, pero de pelo largo. Esta raza es símbolo de riqueza y poder, debido a que fue pedida exclusivamente por la aristocracia, en el siglo XIX porque querían un gato con pelo largo.