En los refrigeradores de la morgue del Hospital Santo Tomás y del Ministerio Público, los cadáveres esperan a ser identificados por sus familiares.
Cada tres meses, el Ministerio Público solicita al Municipio de Panamá espacio en el cementerio de Utivé para poder dar sepultura en fosas comunes a cadáveres sin reclamar. Miriam Marín, subgerente de Empresas Municipales, explicó que la última vez que se abrió la fosa común fueron enterrados 25 cuerpos.





