Sigue la lucha. La Federación Alemana de Fútbol (DFB) rechazó ayer las acusaciones de dopaje de varios internacionales en el Mundial de 1966, tras los informes difundidos sobre el uso de anabolizantes y otras sustancias en la Alemania Occidental.
Fuentes federativas se remitieron ayer a un estudio realizado por la Escuela de Estudios del Deporte de Colonia, según el cual está descartado que los internacionales alemanes incurrieran en dopaje en ese torneo.