Atalaya sigue siendo el lugar de encuentro de centenares de personas que para la Semana Santa, llegan de diferentes áreas del país, a pagar sus mandas ante el Cristo Milagroso Jesús Nazareno.
Después de la pasada romería, donde miles de creyentes llegaron hasta donde se encuentra la imagen, se ha dado el éxodo de personas que llegan a meditar y pedirle a Jesús Nazareno algún tipo de favor, en este caso un milagro.
La Basílica Menor de Atalaya, igual que las calles, permanecen aborrotadas de gente igual que los días antes de la romería del 26 de febrero.