El atacante panameño Ángel Orelién pudo estar en la lista de los involucrados en el acto de indisciplina que cometieron diez jugadores de la Selección Sub-21 de Fútbol de Panamá en los pasados Juegos Centroamericanos 2017, en Managuas, pero no fue así.
El jugador del Sporting San Miguelito, quien tiene 16 años de edad, demostró lo valioso de tomar una buena decisión y que se debe ser responsable de las acciones.