- Además de su grupo de baile, esta dedicada mujer tiene todo un museo de polleras, vestimentas de los congos, tambores y objetos que acompañan el baile.
- Años tiene la pollera más antigua que tiene
- Años dedicándose a cultivar las costumbres del lugar.
- Personajes tiene el baile congo.
- o más tipos de tambores diferentes.
Con gran emoción y un claro sentimiento cultural, Aristela Blandón o mejor conocida como Mamá Ari, aseguró sentir que su cuerpo es poseído por un guía; no es una posesión demoniaca como muchos pueden creer, sino la presencia de uno de sus ancestros negros que quiere que ella cumpla una misión en este mundo terrenal.
Mamá Ari misteriosamente conoce mucho de la cultura y la historia de sus descendientes negros, aunque no vivió en aquel tiempo, igual conoce hechos sobre la esclavitud que ni los libros de historia tienen, esto la ha ayudado en su propósito actual, que es lograr que los más pequeños aprendan a querer la cultura del negro y conservar sus tradiciones.
Ella aseguró que en Portobelo quedó una misión pendiente; uno de sus antepasados no logró terminar una tarea para la cual ella estará destinada.
Hace años, como mandado por sus antepasados, un buen día llegó a Aristela un niño llamado Luigi, que quería aprender a bailar congo y conocer su cultura. Eso la incentivó a formar un grupo de baile de congo con los niños y jóvenes de Portobelo y así empezó su labor.
Como parte de su misión, ella conserva cada paso de la historia de su cultura en la Casa de las Artesanías; al entrar, el olor a antigüedad se desborda, es una casa oscura y misteriosa, donde sobresalen dos figuras humanas con intenso color negro que parece perderse entre la pared del lugar, ellos son María Merced y Juan de Dios, que según la historia fueron los reyes de los esclavos.
María Merced, a pesar de ser una figura inanimada, mantiene una mirada impactante, y vestida con su tradicional pollera de trapito, Juan de Dios forrado en ropa vieja aún deja ver su corpulento cuerpo.
Según Mama Ari, ellos son la esencia del lugar, y nos contó que fueron los líderes de los negros en la época colonial; se distinguen por sus coronas, que están hechas de cartón, decoradas con telas de oro y adornadas con materiales convenientes como grandes pedrerías de colores, espejos.
La corona de la reina se embellece aún más con cintas multicolores, que se derivan de su borde hacia atrás como serpentinas.
Además de su corona, la reina se distingue por una gran cruz, que ella utiliza para protegerse y proteger del diablo a su comunidad.
El traje de la reina, en consonancia con los trajes de otras mujeres del Congo, incluye una pollera, una blusa de manga corta blanca sin mangas o, una enagua, capas de perlas de llamadas Lágrimas de la Virgen (lágrimas de la Virgen María), y una o dos flores con pasador en el cabello.