Una verdadera fiesta de la juventud es lo que se está viviendo en el Encuentro Nacional de Renovación Juvenil (ENRJ), en el que 12 mil jóvenes católicos provenientes de todo el país e incluso de Colombia y Chile- comparten vivencias, testimonios y renuevan su fe.
Un gimnasio del colegio José Daniel Crespo de Chitré completamente abarrotado de jóvenes alegres, dispuestos a vivir una renovación en sus vidas, es lo que se vivió en cada una de las etapas del encuentro.
Un festival de colores, música, y hasta coreografías, vivieron los jóvenes, quienes cantaban y oraban a todo pulmón, a pesar del calor y el cansancio.
Cada uno de los expositores del evento motivó a los jóvenes a reflexionar sobre sus vidas, los problemas cotidianos de cada familia y las situaciones en las que se han visto envueltos, lo que provocó lágrimas de emoción en más de uno de ellos.
Javier Frías, quien viajó junto a 85 amigos desde Tortí, Darién, aseguró que llegó a Chitré con la intención de renovar su vida, encontrarse con Dios y regresar como una nueva persona a su hogar, motivados para cambiar de actitud ante los problemas.
Claro que hay esperanza en la juventud y esta es la prueba, incluso algunos no pueden entrar por las largas filas, pero igual se quedan cerca y escuchan. Los jóvenes no estamos perdidos, aseguró Jacob Jaén, otro de los participantes.
William Samaniego, de 15 años, cuenta que muchos de los participantes salen de aquí tan motivados, que reciben el llamado para iniciar una vida vocacional, y servir de esa forma a Dios.
