Fuman la pipa de la paz

Tras ocho días de protestas en las calles de diferentes puntos del país, el Gobierno y líderes indígenas firmaron ayer un acuerdo, que permitirá reconsiderar en primer debate el Proyecto de Ley 415 para la discusión del artículo 5 en la Asamblea Nacional.

En total fueron 10 puntos los acordados, que incluye la suspensión de las manifestaciones y el retiro inmediato de las unidades antidisturbios en la zonas de conflicto.

Las partes, con la mediación de la Iglesia católica, lograron un convenio que incluye la suspensión de las protestas por parte de los miembros de la etnia Ngöbe-Buglé, y el reinicio hoy de la discusión legislativa con el compromiso de prohibir la minería dentro de la comarca y cuidar su recurso hídrico.

“Creo y tengo fe en Dios que se cumpla lo pactado en el acuerdo y no pase como el año pasado, que hubo muchos acuerdos y no se cumplieron", aseguró la cacique Silvia Carrera.

Mientras que, el ministro de la Presidencia Jimmy Papadimitriu afirmó que “nos comprometemos a buscar la forma de cuidar los recursos hídricos siempre y cuando no afecte la seguridad energética del país”.

VigilantesA pesar de esto, los indígenas aseguraron que se mantendrán vigilantes de que se cumpla tal acuerdo.

Solo anoche se mantuvieron en vigilia en Volcán, provincia de Chiriquí, así como en la capital del país.

Regresa la calma a BocasTras casi una semana de estar cerrado, el puente sobre el río Changuinola fue abierto anoche, luego de la firma del acuerdo.

Se espera, que poco a poco la provincia vuelva a la normalidad, pues hasta ayer aún había desabastecimiento de combustible, alimentos.

Así como el turismo que también fue afectado por las protestas.

Segunda víctima Antes de firmar el acuerdo, la indignación del pueblo Ngäbe Buglé se acentuó más cuando se confirmó la muerte de Mauricio Méndez, de 16 años, a consecuencia de un impacto que recibió en el rostro, en el corregimiento de Las Lomas durante los enfrentamientos entre la Policía y manifestantes que protestaban desde la noche del lunes.

Los familiares de Méndez aseguran que hay un joven de 18 años que acompañaba a su hijo cuando fue impactado y observo cuando presuntamente uno de dos unidades de la Policía disparo contra el joven.

Ante esto, el comisionado Marcos Córdoba, jefe de la Policía Nacional en Chiriquí negó que la unidades de esta entidad tengan responsabilidad en la muerte del joven.

“La necropsia demostrará qué tipo de arma fue la que causó la muerte del menor y vamos a esperar el dictamen médico forense”, dijo.