Tras perder tres partidos en ocho días y decir adiós a casi todos los objetivos que se había marcado esta temporada, el Barcelona intentará hoy frenar su caída libre ante un Athletic Club que huele a Liga de Campeones.
El conjunto azulgrana cayó eliminado de la Champions ante el Atlético de Madrid, tiró media Liga en Granada y perdió la final de la Copa del Rey ante el eterno rival en una semana para olvidar.
Ahora, solo aspira a acabar de la mejor forma la temporada y agotar sus opciones matemáticas de revalidar el título liguero, lo que pasa por ganar los cinco partidos que restan y esperar a que Real Madrid y Atlético tropiecen en alguna de estas cinco jornadas.
Su primer reto será superar la depresión con una victoria en el Camp Nou ante el conjunto que dirige Ernesto Valverde, que busca consolidar su cuarta posición dando la campanada en Barcelona.
Con su victoria frente al Málaga, los vascos han completado una vuelta en zona de Champions, confirmando que es el equipo más sólido de esta otra liga que compite tras los tres grandes.
Con una sola derrota en sus últimos 10 desplazamientos, la fiabilidad del entramado defensivo rojiblanco y, sobre todo, el gran estado de forma de Aritz Aduriz, que ha marcado nueve de los últimos 13 goles bilbaínos y 15 en lo que va de Liga, son los mejores argumentos de un Athletic para asaltar el feudo barcelonista.
El momento de unos y otros, por tanto, parece propicio para que el Athletic acabe con una serie de nueve derrotas en el coliseo azulgrana.